Cuidado! Nos están cerrando el portón.

En una finca de una provincia, vivía un paisano alemán del Volga que elaboraba jamones caseros.
Al pasar por un chiquero, vimos que había una chancha de gran porte, amamantando a su cría.
Con asombro preguntaron al dueño de la estancia, Don Helmut, ¿a qué raza pertenecía esa chancha?, a lo que el alemán les responde: “son de raza argentina”.
Las dudas emergieron en los presentes, a lo que el alemán les responde con un ejemplo:
“¿Conocen ustedes la forma de cazar un chancho salvaje del monte?”
Cualquiera de los presentes pensaron que con la presencia de un perro de caza y una escopeta.
Helmut responde: “en este caso no es así, cuando les comente como los cazo van a entender porque se llama así esta raza, y si son inteligentes, sacaran conclusiones”.
“En el monte del fondo hay un lugar donde estos chanchos se juntan. En un lugarcito limpio empiezo a tirar maíz, y cuando los chanchos lo encuentran, van a comer ahí siempre. Hay que tirar todos los días una ración. Cuando los acostumbras a eso, al lado le pones un solo lado de una cerca. Siempre tirando el maíz así siguen yendo, al principio desconfían, pero después se acostumbran. Eso se repite poniendo sucesivas cercas hasta formar un corral con la abertura para un portón. Ya para ese entonces estarán acostumbrados a la comida fácil y le pierden el miedo al cerco. Un día se le coloca el portón al corral y se los encierra. Se les sigue tirando el maíz. Al principio corren en círculos pero después se olvidan, porque no saben buscar alimento por sí mismos y aceptan la esclavitud a cambio de migajas.”
Rockultural…saca tus propias conclusiones.