(Puerta E)
por Lic. Antonio Díaz Fernández
Un siglo de vida, un siglo de impunidad: “La sangre selk’nam aún espera justicia y reparación”
En 1908 se unían dos firmas capitalistas de Patagonia austral, antes Karukinka, hoy tierra del Fuego, antes el país de los Aonik’enk o aonik’o ch’ooneke hoy Santa Cruz. De esa unión surgió una nueva empresa, con una vasta red de sucursales en todo el territorio mencionado y en Chaco. Justamente en los territorios indígenas independientes, que fueron anexados violentamente por el estado argentino. Justamente, los grandes capitales y macro empresas están asociados simbióticamente al despojo y la apropiación de lo que el estado llamó ‘tierras fiscales’. Gobernar es poblar, reza la mentada frase de J. B. Alberdi, pero los que vinieron de otros continentes a ‘poblar’ –fracasados en sus propios países-, decidieron ‘despoblar de homo sapiens sapiens’ esas tierras y re poblarlas con ovinos. Obviamente no lo hicieron en secreto ni a hurtadillas, el estado argentino lo sabía y fue cómplice en muchos casos. El estado nunca intervino, sino que al contrario ponía sus hombres de armas al servicio y protección de los latifundistas y capitalistas y concedía grandes extensiones de tierras a estos migrantes extracontinentales, invisivilizando a sus ocupantes milenarios. Incluso pagaba al genocida Junius Popper como policía. Me pregunto: ¿Qué siente la sociedad argentina, incluyendo sus gobernantes, frente a la ocupación británica de las islas Malvinas? la respuesta es obvia. Me pregunto otra vez: ¿Qué sentirán los qom (toba), los pilagás, los aonik’enk, los mapuches, etc. frente a la ocupación argentina de sus tierras? Los argentinos esperan devolución de Malvinas ¿El estado argentino pensará en devolver las tierras usurpadas a los pueblos originarios y concedidas a los grandes latifundistas?
¿Qué hay que celebrar? ¿Quién conoce a Teneneshk, Hálimink, Kawchiqol, Atel, Kawsel, Yayosh? Su voces fueron silenciadas para siempre en el obscuro mundo de los crímenes de lesa humanidad, aún impunes. Es muy probable que no se conozca sobre el hain, un haruwen, los klóket’en, un jo’on, etc., el maravilloso mundo Selk’nam fue borrado de la faz de la tierra, por los grandes capitales que se enorgullecen de sus logros, pero no recuerdan como los hicieron, con las manos manchadas con sangre Selk’nam y con peones explotados. Finalmente me pregunto ¿por quién será el mentado ‘aprecio’? ¿por ud.? Antonio Díaz-Fernández Descendiente del pueblo diaguita-kalchakí
Bibliografía recomendada:
Borrero, José Ma.: La Patagonia trágica, Bs. As., Editorial Americana, 1974
Chapman, Anne: Los selk’nam. La vida de los onas. Bs. As., Emecé Editores, 1986.
Chapman, Anne: El fiun de un mundo. Los selk’nam de Tierra del Fuego. Bs. As., Vázquez Mazzini Editores, 1990.
Magrassi, Guillermo: Los Aborígenes de la Argentina, Bs.As., Ediciones Búsqueda-Yuchán, 1989.
Que tristeza. Acaso se creían más importantes estos usurpadores. Y saber que ésto sigue pasando. Siempre voy a repudiar a la gente que busca el dinero a costa de inocentes
ResponderEliminar