Continúan por quinto día las protestas contra la austeridad en Rumanía

(Kaos en la Red)
Las protestas de los ciudadanos rumanos que piden la dimisión del Gobierno y del presidente del país por sus drásticas políticas de austeridad y la caída del nivel de vida continúan con fuerza hoy, por quinto día consecutivo.
Agencias
Según datos de la Gendarmería, en torno a 13.000 personas han salido a la calle desde el viernes pasado hasta ahora en todo el país balcánico.
Hoy, de acuerdo con las televisiones locales, al menos 600 personas han salido a la calle en Bucarest, y miles de ciudadanos se han concentrado en ciudades como Constanza, Timisoara o Cluj, pese a la promesa del primer ministro, Emil Boc, de iniciar un "diálogo social".
Tampoco ha calmado a los manifestantes la vuelta a su cargo este martes del popular subsecretario de Estado de Sanidad, Raed Arafat, en cuyo apoyo comenzaron las protestas, después de que éste se opusiera a la reforma sanitaria del Gobierno que debía privatizar algunos servicios públicos.
Arafat declaró hoy que el jefe del Estado, Traian Basescu, y el primer ministro le han pedido personalmente su regreso al ministerio.
El propio Basescu había conminado públicamente a Arafat a dimitir si no estaba de acuerdo con el ministro de Sanidad, que el pasado viernes retiró el proyecto de ley de reforma ante la oposición ciudadana y de los profesionales del sistema de salud.
La primera ola de protestas espontánea y continuada que Rumanía vive en los últimos veinte años aglutina ya a todo tipo de descontentos con la gestión de Basescu y Boc.
Como pudo comprobar Efe en la plaza de la Universidad de Bucarest, el malestar de los ciudadanos no se limita a los recortes sociales y las subidas de impuestos decididas por el Gobierno tras su acuerdo crediticio en 2009 con el Fondo Monetario Internacional.
Grupos ecologistas y de defensa del patrimonio protestan contra la intención de los dirigentes rumanos de autorizar la explotación de las reservas mineras de Rosia Montana, las mayores de oro de Europa.
Ciudadanos de todas las edades y condiciones gritan contra la corrupción y llaman "dictador" a Basescu, que contra su costumbre aún no ha comparecido en público durante la crisis y habría recibido a Boc en el palacio presidencial para tratar sobre la situación, según informó la agencia Mediafax.
"Abajo el régimen Basescu", es una de las pancartas más habituales. Están escritas a mano u ordenador, en una prueba de que ni los sindicatos ni los partidos han organizado la protesta.
Como ya ocurrió el lunes, la concentración es hasta el momento pacífica, después de que los enfrentamientos entre manifestantes violentos y gendarmes dejaran decenas de heridos el fin de semana.
Las medidas de seguridad son estrictas en la plaza. La policía controla en los accesos a grupos de jóvenes con las capuchas caladas.
Según informó la Gendarmería, miembros de los grupos ultras de los equipos de fútbol de la capital tuvieron un papel protagonista en los incidentes del fin de semana, cuando lanzaron bengalas, petardos y todo tipo de objetos contra los agentes.