(teleSUR)
OTAN intensifica ataques en Trípoli. (Foto: Archivo)
Un total de 11 muertos y un número indeterminado de heridos dejó un nuevo ataque de las fuerzas imperialistas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), ejecutado en la noche de este lunes en la localidad de Zliten, entre la ciudad de Trípoli y Misrata, al norte de Libia.
En esta ciudad se llevó a cabo la visita del presidente sudafricano, Jacob Zuma, para conversar con el presidente libio, Muammar Al Gaddafi, a fin de encontrar una estrategia de salida al conflicto.
El Gobierno de Libia denunció que los últimos ataques de la OTAN se han concentrado en la zonas pobladas. En este último el saldo fue de 11 civiles fallecidos.
La televisión estatal libia informó que los ataques también se concentraron en Jufra, ubicada a unos 600 kilómetros de la capital libia, población que había sido objeto de bombardeos durante la noche del domingo. Asimismo, seleccionaron como objetivos la ciudad fronteriza de Nalut y la región de Tiji (oeste), en las que se registraron pérdidas humanas y materiales.
Por su parte, la OTAN anunció que había destruido una veintena de objetivos militares, en particular un lanzamisiles, durante los ataques llevados a cabo este domingo en los alrededores de Misrata.
Visita de Zuma
Durante la visita de Jacob Zuma al conjunto residencial de Bab Al Aziziya, ubicado en la capital de Libia, se observó la presencia de miembros del cuerpo de seguridad de Muammar Al Gaddafi y altos funcionarios de su Gobierno.
La televisora estatal proyectó imágenes que mostraban al líder libio recibiendo a Zuma, siendo ésta su primera aparición pública en dos semanas.
Jana refirió que en el encuentro el Gobierno libio denunció las violaciones de la coalición del Atlántico Norte a las resoluciones de la Organizaciones de Naciones Unidas (ONU), haciendo énfasis en las tentativas de "asesinatos políticos", la destrucción de infrastructuras y el bloqueo marítimo impuesto a su país.
El diplomático sudafricano declaró a la prensa que el hecho de "pedir el permiso de la OTAN" mina "la integridad de la Unión Africana".
Desde marzo pasado, cuando la OTAN asumió el control de las operaciones contra el Gobierno de Libia, Al Gaddafi sólo acepta la mediación de la Unión Áfricana en el conflicto.
Al inicio de su misión presentó una "hoja de ruta" aceptada por el Ejecutivo pero rechazada por el autonombrado Consejo Nacional de Transición (CNT), la dirección política de los insurgentes.
En esta ciudad se llevó a cabo la visita del presidente sudafricano, Jacob Zuma, para conversar con el presidente libio, Muammar Al Gaddafi, a fin de encontrar una estrategia de salida al conflicto.
El Gobierno de Libia denunció que los últimos ataques de la OTAN se han concentrado en la zonas pobladas. En este último el saldo fue de 11 civiles fallecidos.
La televisión estatal libia informó que los ataques también se concentraron en Jufra, ubicada a unos 600 kilómetros de la capital libia, población que había sido objeto de bombardeos durante la noche del domingo. Asimismo, seleccionaron como objetivos la ciudad fronteriza de Nalut y la región de Tiji (oeste), en las que se registraron pérdidas humanas y materiales.
Por su parte, la OTAN anunció que había destruido una veintena de objetivos militares, en particular un lanzamisiles, durante los ataques llevados a cabo este domingo en los alrededores de Misrata.
Visita de Zuma
Durante la visita de Jacob Zuma al conjunto residencial de Bab Al Aziziya, ubicado en la capital de Libia, se observó la presencia de miembros del cuerpo de seguridad de Muammar Al Gaddafi y altos funcionarios de su Gobierno.
La televisora estatal proyectó imágenes que mostraban al líder libio recibiendo a Zuma, siendo ésta su primera aparición pública en dos semanas.
Jana refirió que en el encuentro el Gobierno libio denunció las violaciones de la coalición del Atlántico Norte a las resoluciones de la Organizaciones de Naciones Unidas (ONU), haciendo énfasis en las tentativas de "asesinatos políticos", la destrucción de infrastructuras y el bloqueo marítimo impuesto a su país.
El diplomático sudafricano declaró a la prensa que el hecho de "pedir el permiso de la OTAN" mina "la integridad de la Unión Africana".
Desde marzo pasado, cuando la OTAN asumió el control de las operaciones contra el Gobierno de Libia, Al Gaddafi sólo acepta la mediación de la Unión Áfricana en el conflicto.
Al inicio de su misión presentó una "hoja de ruta" aceptada por el Ejecutivo pero rechazada por el autonombrado Consejo Nacional de Transición (CNT), la dirección política de los insurgentes.